Los desaciertos que han tenido los mandatarios en Boyacá hoy tienen las UCI colapsadas, la capacidad hospitalaria es insuficiente para atender la emergencia que se ve venir en Tunja, Sogamoso, Villa de Leyva, Duitama y Moniquirá.
La gerente del Covid-19 Carolina Espitia ha pasado por su cargo sin pena ni gloria, literalmente ni suena ni truena, carece de liderazgo y de gestión para afrontar la crisis que hoy deja numerosas victimas fatales.
Hoy se realizó un Consejo de Seguridad Departamental con alcaldes, el Ejército y la Policía de Boyacá, el Gobernador busco articular acciones para hacer cumplir las medidas, una reunión que se hace cuando la pandemia se salió de las manos, un poco tarde articular cuando el sistema hospitalario no da más.
No hay clima de autoridad ni de Gobierno en Boyacá, un departamento que cada vez se endeuda más al tiempo que crece la pobreza y el desempleo. Ni habla de la Asamblea de Boyacá, no se ha realizado el primer control político a la gerente del Covid-19 Carolina Espitia, lamentable el escenario que hoy tienen los boyacenses ante la inevitable incertidumbre.