Hoy mis líneas están inspiradas en una crítica constructiva desde mi actual estado de conciencia al libro “Una Vida con Propósito” escrito por Rick Warren pastor cristiano estadounidense. Sin duda, el título del libro inspira para devorar sus páginas de principio a fin.
Más que un libro voy a reseñar en esta columna una hoja de ruta para hacer un maravilloso viaje espiritual que te lleva más allá de la mera supervivencia y de encontrar el tan anhelado éxito idealizado, te lleva a una vida con significado, a la vida para la que estás destinado, este es el punto de partida, vernos proyectados en la pantalla de la vida, comprender y cumplir el propósito para el cual fuimos crearnos.
Es por lo anterior que para empezar he formulado las siguientes preguntas ¿Cómo agregarle valor a la vida y no vivir el sin sentido que nos ofrece la realidad? ¿Para qué fui hecha? Son interrogantes universales que las personas difícilmente podemos responder porque buscamos las respuestas apoyándonos en sueños, anhelos, deseos y necesidades personales.
Todo lo anterior desde lo externo, alimentando vanidades y egos que traen vacíos cuando tu espíritu no está fortalecido y no tienes una relación real con la Divinidad, cualquiera que sea tu creencia o religión.
De niña me llevaban como un ritual todos los días al santuario, crecí entre rosarios y alabanzas, hace unos años atrás asistí a una iglesia cristiana como muchos buscando un Dios que parecía distante, estuve con chamanes, en templos y mezquitas, no era autentico mi sentir y buscaba en el afuera siguiendo prototipos y creencias impuestas por aquella persona que desde los cuatro añitos cuidaba de mí.
Sí; no tuve la fortuna de un hogar conformado por Mamá y Papá a este último nunca lo conocí, pero así era el plan, no soy un “accidente” tal vez mucho antes de ser concebida por ellos ya estaba concebida en la mente del ser Divino.
Pasaron los años y a partir de esa historia fui descubriendo que vivir con propósito es una de las experiencias más emocionantes y plenas que puedes disfrutar en la vida, que no se trata del tener sino de Ser, eso transformo de manera espiritual la respuesta y desarrollo mi carácter.
Entonces; deje de cuestionar del porque a mí y empecé a buscar el para que, hoy te puedo decir que la vida tiene varias formas de verse, de vivirse, no todo es lo que nos han enseñado o impuesto, tu elijes hasta dónde quieres llegar y cómo quieres que tu vida sea.
Aunque difiero en algunas descripciones con el autor del libro Rick Warren con base en mi experiencia sé que todos tenemos un propósito, que Dios no está en lo externo, ni en estatuas de rostros perfectos, templos o mezquitas, Él está dentro en cada ser humano y tú lo reflejas con tus actos más que con palabras, esa es la verdadera adoración independiente de las creencias religiosas.
Si deseas que tu vida impacte, encuentra tu propósito.
Por: Albita Neira
Sigueme en Intagram albitaneira03